El EFF advierte que el “procesamiento de datos a menudo invade nuestra privacidad, disuade nuestra libertad de expresión y asociación, y carga de forma dispar a las minorías raciales.” Para evitar abuso, la recolección de ‘grandes datos’ sobre los movimientos de individuos debe en primer lugar de ser, transparente – debemos de saber lo que es que se está recolectando y porque. Y segundo: después que ha servido su función para contención del virus, la información debe ser purgado.
No hay ninguna necesidad para retener datos sobre los movimientos de individuos por un termino de 10 años por un virus que se incuba en sólo 10 días.
Si permitimos que nuestros gobiernos nos vigilen, tenemos que también vigilar el uso y retención de los datos que recopilan.